FABRIK – MADRID
El pasado sábado nos dirigimos a Fabrik con motivo de la celebración del row, terraza abierta, tobogan, Pan-Pot, Matador… había varios alicientes para acudir a este evento.
Entramos a las 18.15 horas debido a que teníamos amistades que tenían entradas por cumpleaños, nos sorprendió la cantidad de gente que entraba por este motivo al igual que nos sorprendió la cantidad de personas que fueron tiradas en puerta por excusas varias como la vestimenta, todos invitados por cumpleaños, tuvimos la oportunidad de hablar con varios de estos grupos en el parking y malas pintas tampoco llevaban pero… imagino que política de empresa.
El calor que hacía el pasado fin de semana era soporífero y dentro de la terraza era algo mas llevadero debido a la carpa y los aspersores colocados, entramos justo para el final de la sesión de Bastian Bux, estuvimos escuchándolo una media hora y no estuvo nada mal, muy de terraceo ibicenco que hacia a la gente moverse y dejandole el terreno allanado a uno de los esperados de la noche, Matador.
Empezó el set de Matador, no supo aprovechar el camino que le había dejado su predecesor y comenzó demasiado lento, volviendo a parar al público que esperaba saltar y y disfrutar desde el principio, pronto se gano al público asistente cuando a los 25 minutos pincho el kingswing, poniendo a los asistentes a bailar sin parar. La terraza ya estaba al completo y el ambiente muy divertido, con zancudos de por medio y un espontaneo que desde lo alto del tobogán causaba las risas de los que estaban abajo, para nuestro gusto musical era algo lento pero la sesión estuvo muy bien.
A las 20.30 nos salimos a coger un poco de aire para poder seguir con vida las 10 horas y media que quedaban de evento, unas copas con los amigos y otra vez para adentro, aproximadamente sobre las 23.30 horas entramos con la apertura de la main room.
Entramos y estuvimos bailando la mitad de la sesión de Cesar Almena y nos dirigimos a donde plantaríamos campamento base por el musicón que pusieron todos los djs durante las 7 horas que permaneció abierto, la sala satélite (Florida 135). Desde su inicio y sin dar respiro, todos los djs se enzarzaron en una lucha de quien lo hacia mejor, Nuke que fue el primero dejo el listón bastante alto y claro empezando así ya me dirás, los siguientes tenían que entrar con las pilas cargadas sino… contundencia y mucho ritmo el que Nuke nos brindó.
Con el fin de la sesión de Nuke nos dirigimos al set especial de 3 horas de Pan Pot, del cual duramos poco mas de 45 minutos, estuvo bien el dúo alemán, si, pero claro vienes con los oídos cargados de la contundencia de satélite y te parece un ritmo demasiado lento, la main room hasta arriba y el publico que se lo bailaba todo, serpentina, confeti, zancudos, megatrón… todos los alicientes para un fiestón de altura. Sería la última vez que pisáramos la main hasta el cierre de Florida 135.
Monoloc, impresionante, como ya dijimos ayer en nuestra página, el mejor de la noche junto al apoteosico Andres Campo, hicieron lo que les vino en gana poniendo la satélite del revés, a estos dos no les hace falta confeti ni serpentina para hacer disfrutar al público. También de notable alto la actuación de Secret Cinema, rapidez, virtuosismo en los platos y una selección musical cuidada por parte de todos los djs de la zona Florida, contundencia y techno en estado puro, gracias por hacernos bailar tanto y tan bien.
Increíble el hiper ventilador que hay en la sala satélite, desde que entramos con Monoloc hasta casi el cierre con Andres parecía que estábamos en una prueba del túnel del viento, funciona con tanta fuerza que hasta escuchabas el viento pese a los decibelios, eso sí, calor no pasamos en ningún momento y fumarse un cigarro era casi misión imposible.
En general, para nuestro gusto musical, una tarde-noche muy buena y disfrutamos bastante, por lo demás que rodea el evento… pues el row… mucha gente sin camiseta (cosa que debería prohibir ya al menos en espacios cerrados), vimos demasiadas peleas y esto no nos gusta nada, digna mención para la seguridad de Fabrik que no paraba de correr de un lado a otro, mucho publico buscando fiesta y no música, pero el row es el row sabíamos a lo que íbamos y nos exponíamos.