Los promotores British Land y AustraliaSuper esperan restaurar el club junto con nuevas oficinas y tiendas, según se presenten los planes para lograr un lugar cultural permanente
Printworks, el icónico club londinense con capacidad para 6000 personas, podría reabrir en 2026 como un “lugar cultural permanente”, según los nuevos planes de desarrollo presentados al Consejo de Southwark.
Las promotoras inmobiliarias British Land y AustralianSuper, propietarias del espacio del sur de Londres, han presentado una propuesta detallada para restablecer la mitad del edificio como espacio cultural, mientras que la otra mitad se convertiría en oficinas y tiendas, tal y como se había planeado anteriormente.
El desarrollo polivalente permitiría que los eventos de música electrónica, las noches de club, las exposiciones de arte y los eventos corporativos volvieran a celebrarse en Printworks London, que cerró sus puertas en mayo de 2023, seis años después de su apertura.
Un lugar con gran impacto en el panorama cultural de Londres
Los planes propuestos también incluyen un nuevo espacio en la terraza de la azotea, un espacio de actuaciones más pequeño llamado ‘The Inkwells’ y nuevas suites de hospitalidad corporativa y de conferencias. Como decimos, la otra mitad del edificio, conocido como ‘The Grand Press’, se convertiría en oficinas para 1.500 trabajadores, así como en tiendas.
Originalmente, se esperaba que el antiguo edificio de las salas de prensa, conocido como ‘Harmsworth Quays’, fuera demolido para reconstruir el área con apartamentos de lujo, tiendas, oficinas y restaurantes.
Sin embargo, al desarrollar el nuevo espacio, British Land tiene la intención de salvar la mayor cantidad posible del equipo de impresión original (recordemos que Printworks es una antigua planta de impresión de periódicos como el Daily Mail), incluida gran parte de la última prensa, que se encuentra a cuatro pisos de altura, junto con rodillos, estantes de almacenamiento de papel, líneas de tinta y válvulas.
Printworks ha tenido un tremendo impacto en el panorama cultural del Reino Unido, y su popularidad en los últimos seis años ha demostrado lo importante que es este lugar para los londinenses y sus visitantes.